24 de diciembre de 2008

Feliz Navidad


Amigos todos; deseo a ustedes una Feliz Navidad y un prospero año nuevo. Que la dicha y la paz reine en el hogar de todos ustedes y que perdure para siempre.
Aprovecho esta ocasión para agradecerles a todos ustedes el honor que me hacen de visitar mi pagina y mas importante, que se tomen el tiempo de leer lo que escribo.

Pasenla bien y cuidense mucho.

Un sincero abrazo.


19 de diciembre de 2008

La Aventura...


Pertenecíamos a un club de ciclismo llamado Club Halcones de Piedras Negras, donde el dueño de un negocio de reparación de motocicletas y bicicletas localizado por la calle Guerrero entre Galeana y Victoria era el famoso “Fidencio”(de lentes oscuros en la foto de la izquierda donde se encuentra tambien Don Carmelo Cipriano y Carlos su hijo. Pulsen las fotos para ver los detalles). Mis amigos y yo éramos los chiquillos del club y Juan Abel Hernández y otros amigos de su edad eran los adultos y quienes montaban sus pesadas motocicletas con manubrios altos al estilo de los "Rebeldes Sin Causa" de los 60´s.

Fidencio solía organizar competencias de ciclismo en la calle López Mateos donde la ruta que se cubría era desde la Carta Blanca (donde esta ahora una mueblería), hasta la calle de Román Cepeda (donde esta ahora el Restaurante El Mezquite). Había que dar 3 vueltas para sacar los ganadores ante la concurrencia que abarrotaba las aceras de la avenida para ver la competencia. Primero competíamos los de las bananas y después los ciclistas mayores y donde venían competidores de la región a enfrentarse contra los de Piedras Negras.

Se programo entonces la competencia más importante del año. La ruta por la carretera 57 hasta la ciudad de Nava Coahuila. “Le Tour de Nava” de petatiux. Seria el evento más importante hasta esa fecha organizado en Piedras Negras y los participantes andabamos muy emocionados. Nosotros los de las bananas correríamos hasta la garita del kilometro 22 y regresaríamos a la meta localizada frente a la escuela Altamirano. Los ciclistas mas grandes lo harían hasta Nava y de regreso a la misma meta. Nuestra edad rondaba entre los 12 años.

Dada la magnitud del evento había que prepararnos física y mentalmente. Porque aparte de la competencia que teníamos entre nosotros mismos, vendrían a las carreras ciclistas de nuestra categoría de la región. Para eso, practicábamos todas las tardes dando vueltas a toda velocidad a la plaza principal así como en la calle López Mateos con el fin de ejercitarnos adecuadamente. Sentíamos que no era suficiente. Necesitábamos practicar la ruta, así que se nos ocurrió (yo no fui el ocurrente, que conste) que si íbamos a correr en carretera, lo lógico seria practicar en carretera hasta la garita del kilometro 22. Bah!, ¿porque no?

Sin que nuestros padres se dieran cuenta organizamos la práctica por la carretera 57 un sabado. Saldríamos temprano de la casa de Balo Hernandez y consideramos estar de regreso y sin contratiempos a medio día. Diríamos a nuestros papás que andábamos jugando basket en el Gimnasio Municipal y ni cuenta se habrían de dar. Recuerden que en aquel tiempo no había celulares, por lo que éramos unos verdaderos niños libres de la comunicación insensata.

Balo Hernández, La Rana de la Paz, Oscar de los Santos, Víctor “nomeacuerdoelapellido” Homero Hernández y yo (si me falta alguno y me leen los involucrados, ayúdenme a recordar) nos lanzamos a nuestra aventura. Con nuestras bananas tomamos la carretera 57 rumbo al sur y en pelotón fuimos disfrutando el paisaje regional mientras nos ejercitábamos (recuerden que no había MICARE ni camiones carboneros). Al poco rato, por allá en las curvas de Rio Escondido (no estaba construido el paso a desnivel) Balo, el mas fuerte competidor de nuestro equipo, se nos había despegado y tendíamos que seguirle el ritmo. Los camiones y los carros nos pasaban rozando ya que era una carretera de un solo carril y ni crean que tenía acotamiento. El acotamiento era un zacatal que nos llegaba a las rodillas.
Por fin llegamos a la garita del kilometro 22 y cuando pensábamos regresarnos a Piedras, nos dimos cuenta que estaba sin vigilancia. Los fiscales estaban en la siesta y sin pensarla dos veces nos pasamos rumbo a Nava raudos y veloces por el carril contrario. Ni cuenta se dieron los aduanales. Se nos ocurrió sin pensarlo y sin habernos dicho nada entre nosotros. Al ver la puerta abierta entramos en bola y rodeados de juveniles risas con mezcla de adrenalina le dimos rumbo a Nava York!

Cuando llegamos a la tierra prometida nos fuimos a un estanquillo a tomarnos una soda y el señor de ahí nos dio unos aguacates que nos comimos con galletas saladas. Después de descansar un rato en la Plaza de Nava, bajo los frondosos álamos (¿cuales?) nos dispusimos a regresar de donde nunca debimos de haber salido.

De regreso a Piedras nos detuvimos en el letrero que da la bienvenida a Nava y pusimos ahí nuestros nombres con un plumón que traía Oscar. Sería para la posteridad, dijimos cuando hicimos nuestro grafiti. Supongo que fuimos los primeros grafiteros de Nava y la región.

Los regresos siempre son muy tediosos y este no fue la excepción y para acabarla ya se nos estaba haciendo tarde. Las bananas que traíamos tenían 5 cambios, pero la bicicleta nueva del riquillo del grupo, que le habían comprado en Western Auto, traía diez cambios por las cinco estrellas en el piñón trasero y las dos estrellas grandes al frente, así que aprovechando la nueva tecnología le metió uno de los cambios y se lanzo en persecución de Balo quien ya iba por el Km 10 mientras nosotros apenas íbamos por el rancho de los Ibarra. Seguramente iba asustado porque la cintareada estaría fuerte si no llegaba a tiempo a su casa. Ya estaba tardeando y de seguro los papás andarían en nuestra búsqueda sin haber ido a comer y sin saber de nosotros, hecho poco frecuente en nuestras familias. Ahora a los güercos desobedientes los papás les celebran sus excesos, pero en nuestra época de chamacos, si la regabas te ganabas una cintareada bien dada.

Cuando íbamos llegando a la Villa que voy viendo a mi mamá!...en la madre!

Con sus siempre hermosos ojos que destellaban un disimulado enojo pero si un real y contenido susto por el riesgo donde andaba su “conse” me lo dijo todo. Subimos las bicicletas de los que quedábamos rezagados a la cajuela y mamá solo me dijo….”n'ombre, n'ombre…que bárbaro!” y yo con los ojos pelones volteando a ver a los otros amigos conteniendo las sonrisas, no decíamos nada, ni chistábamos en el asiento trasero del carro. Les leía el gesto en su cara que me decían “ándale güey!” yo pensaba; que bueno que nos recogió en la Villa porque ya veníamos bien cansados de pedalear, pero evite el comentario so pena de ganarme un madrazazazo entre ceja oreja y progenitora!. Después supe que el chismoso había sido Chuy, uno de los traileros que le traían fruta a papá quien al verme en la carretera cuando el iba hacia Monterrey, pidió el teléfono a los de la aduana para dar su reporte de los ciclistas y porque además sabia que mis papás andaban muy mortificados porque no me localizaban.
Cuando llegó papá a la casa me hecho la mirada #3 que quiere decir “la riegas diamadre” y se dispuso a cenar mientras yo lo veía de reojo esperando de un momento a otro la fuerte regañada. No me dijo nada más. Con la pura mirada me hizo temblar.

Obvio decirles que al otro día, sospechosamente desaprecio mi bicicleta, lo que me imposibilito de participar en “Le Tour de Nava” aunque les soy sincero, no me dolió tanto como el hecho de haberle causado un susto tan grande a "my mom".
Nota de la redaccion: La banana apareció milagrosamente una vez que concluyó el evento.

Nos Vemos…

16 de diciembre de 2008

Tragedia...


Había tardado en escribir porque no me llegaba la inspiración. Cuando se escribe por rutina se pierde la sensibilidad de expresarnos como quisiéramos y nos ponemos a teclear sin ton ni son sobre temas insípidos. Algunas veces, por suerte lo que escribimos llega a tener cierto interés y aceptación del lector y otras veces, la mayoría, son tan aburridos como esos correos de chistes y cadenas que saturan nuestro buzón electrónico.

La inspiración no es algo que se traiga en la bolsa del pantalón, en la USB Memory o en algún archivo de la computadora. Es muy rejega ella y mas cuando uno trae la cabeza hecha bolas con el cierre del ejercicio anual, el presupuesto de ingresos y egresos del próximo año y los planes, proyectos y programas de trabajo del proximo ejercicio, pero además de eso, por la preocupación constante de que los Cowboys no vayan a pasar a los play offs. Ni Dios lo quiera. Eso sería digno de una tragedia de magnitud insospechada en la que Juanito seria la primera victima que se lanzará al precipicio seguido de todos los González, de la Cabada y demás aficionados de hueso colorado al equipo de la estrella solitaria que los acompañan aqui en Piedras Negras y Eagle Pass.

Cuando mas tranquilo estás esperando que llegue la inspiración, se topa uno con noticias tan tristes y desgarradoras que nos hacen reflexionar en lo vulnerable que somos. De que manera un momento, una decisión, un alto, un café, o regresarte a contestar el teléfono, puede cambiar el curso de nuestra vida. ¿El destino está escrito o nosotros lo forjamos? Nomas Él lo sabe.

Los que circulamos diariamente por la carretera 57 sabemos lo peligroso que esta el lugar donde sucedió el accidente en el cual perdió la vida el hijo de un querido amigo y compañero nuestro. Y mas con la afluencia que actualmente tiene desde que se instalo la empresa Modelo, donde sus trabajadores tiene que dar la vuelta en “u” para llegar a su trabajo. En esa desviación que esta al bajar el paso a desnivel sobre las vías del ferrocarril de la estación Rio Escondido convergen todos los vehículos que se dirigen a la gasolinera Rio Escondido, la UTNC, Minas de MICARE y actualmente la Modelo haciendo un embotellamiento de vehículos de todo tipo que prácticamente impiden la visibilidad a los conductores que tratan a toda costa de ganar el paso a los que transitan a alta velocidad, corriendo estos un verdadero peligro y causando tragedias como la que ocurrió este sábado a las 8:30 am. Con la experiencia de 29 años transitando por ahí a diario, nos atrevíamos a predecir que si no corregían ese retorno, algún día habría un lamentable accidente en ese lugar por lo mal ubicado que está. Y desgraciadamente sucedió.

Que triste tener que escribir al respecto y que rabia da saber que una de las causas principales que ocasionaron el accidente fue por el mal estado de las carreteras, lo peligroso de los cruceros y por la pésima atención al respecto dan a esa problemática la autoridad responsable de mantener los caminos federales seguros y en buen estado para los contribuyentes. No se si tengan la mas mínima intención de corregir ese retorno, pero es urgente que lo hagan antes de que suceda otro accidente de iguales o peores proporciones. Y de pasada a ver si se les ocurre pintar las rayas divisorias de la carretera porque de noche es un pozo ciego transitar por ahí.
Lo más triste de todo esto es que ninguna autoridad se responsabiliza y hace ni dice nada. La familia se encuentra completamente destrozada después del lamentable accidente y ni las autoridades o las empresas que ocasionan diariamente el congestionamiento en ese lugar levantan la mano para ocuparse del problema. Dentro de poco todo quedará en el olvido y los que utilizamos esa carretera para llegar a nuestro trabajo seguiremos con el riesgo latente de otro accidente. Así se estila en Coahuila, así se estila en México.

Por último, tengan mucho cuidado aquellos que van a viajar durante estas vacaciones de navidad por las carreteras de Coahuila que con tanto orgullo promociona el Gobierno de la Gente. Porque al menos el tramo Piedras Negras - Monclova está en pésimas condiciones, con baches, sin señalamientos y algunos tramos sin pintura de las rayas laterales y centrales que hace que de noche sea un verdadero riesgo transitarlas y mas con tanto camion carbonero que transita por la carretera. Manejen con precaución y no arriesguen a su familia por llegar unos minutos antes a su destino. Es un hecho de que si manejamos rumbo a Saltillo a 140 km por hora hacemos un tiempo de 4 horas, y si lo hacemos a 110 llegamos en 5. Asi que por una hora menos, no vale la pena arriesgar nuestra vida y sobre todo, la de nuestra familia.

Que pasen ustedes una Feliz Navidad y que el próximo año esté lleno de bendiciones.

Nos Vemos…

5 de diciembre de 2008

El Campestre...


Este 1 de Diciembre fueron las elecciones en el Club Campestre de Villa de Fuente. No les hare una reseña detallada ya que esta fue cubierta por los periódicos y noticieros de la localidad, pero permitanme comentarles lo que percibí durante el evento.

En primer lugar quiero decirles que jamás había visto a tantos socios del Campestre reunidos en un mismo evento, se veia fenomenal el recinto lleno de gente interesada en el resultado de las elecciones y donde aproveche para saludar buenos amigos que tenia tiempo de no ver. Supongo que esto se debió principalmente a que las dos planillas contaban con muchísimos colaboradores, tanto que cuando a éstos se les solicitó su presencia en el estrado, el área de la concurrencia quedo practicamente vacía. Como que había mas generales que tropa, pero eso no demeritó que el proceso se llevara a cabo de una manera ordenada y transparente.

En esta ocasión Fernando Saldaña y Cesar Berain fueron los candidatos registrados para administrar los siguientes dos años los destinos del Club Campestre y la verdad que ambos tuvieron la visión de rodearse de excelentes colaboradores que con su valiosa participación, experiencia, arraigo en el club y juventud desbordada, les elaboraron unos proyectos de trabajo a corto, mediano y largo plazo muy ambiciosos para beneficio de los socios del Club, comprometiendo por medio de unas presentaciones muy bien preparadas, a ambos candidatos. Los presentes estuvimos muy atentos y los contendientes deben saber que no pocos socios estuvieron tomando nota de todas las promesas que hicieron.

Si estos proyectos que los candidatos ofrecieron a los socios para conseguir su voto son cumplidos, tengan la seguridad de que el Club Campestre continuara siendo lo que hasta ahora es, el mejor Club Social de Piedras Negras, tanto en instalaciones como en administración y organización. Las evidencias no dejan lugar a dudas, por lo que no creo que nadie en su sano juicio dude de que el Campestre está bonito, funcional y sobre todo, muy bien administrado.

Fernando Saldaña resulto el ganador en estas elecciones por muy poco margen, lo que hace mas significativo su triunfo ya que sabe que deberá trabajar con eficiencia para demostrar a sus seguidores que se merecía su confianza y a los que no lo fueron, convencerlos que después de las elecciones, todos los socios tienen los mismos derechos y que por lo tanto, la mesa directiva trabajara para el bien de todos.

A mi me deja una grata satisfacción como socio (no muy activo) del Club Campestre estas elecciones. Principalmente el respeto y la armonía durante los comicios electorales y la manera digna con la que inmediatamente de haberse conocido el resultado, en el mismo recinto Cesar reconoció la derrota ofreciendo su apoyo incondicional a los proyectos de Fernando. Saldaña por su parte ha comentado que los proyectos que propuso Cesar serán analizados para incorporarlos a su gestión. Asi es como se trabaja en el Campestre y eso es motivo de orgullo y satisfaccion de los socios.

Otra de las satisfacciones de la noche fue saludar a tantos amigos que hacia tiempo no veía. Vaya! si se ven igualitos que como los deje de ver hace años hombre. Pues ¿que comen y toman? Mas delgados todos, con mucho pelo, con un caracter jovial, con la sonrisa a flor de piel y caminando derechitos todos ellos. Yo voy a ir mas seguido al Campestre. No vaya a ser que esto se deba a un elixir que Tavo les este suministrando en las bebidas y en las salsas de las continuas carnes asadas que hacen por ahi. Como dice el maestro Dehesa, aikir.

Nos Vemos…