26 de abril de 2008

Nuestros Chavos...


Un estudio realizado por la Secretaría de Salud (SSA), revela que en los últimos 10 años el sobrepeso y la obesidad infantil han crecido hasta un 60 por ciento debido a que los pequeños registran alteraciones genéticas. Otros de los factores que intervienen son los malos hábitos alimenticios y el sedentarismo de los menores.

Cifras de la SSA revelan que actualmente los niños pasan un promedio de cuatro horas diarias frente al televisor, los videojuegos o navegando en Internet. Este tipo de actividades suple la práctica de alguna actividad física que seguramente les traería beneficios en su salud.

Además, la obesidad y el sobre peso incrementan el riesgo a padecer males como la diabetes, hipertensión, cardiacos, renales, lípidos, articulares e incluso, cáncer, reconoció la dependencia gubernamental.

Según estudios llevados a cabo por las autoridades de salud, los estados que registran mayor porcentaje de obesos son; Coahuila, con un 32.2 por ciento, Tamaulipas con un 31.5 por ciento, Colima con un 31.4 por ciento y Baja California Norte con un 30.8 por ciento.

El sobrepeso y la obesidad en los infantes, desgraciadamente están detonando la aparición de diversas enfermedades que anteriormente sólo se veían en la población adulta, como la hipertensión, diabetes, altos índices de colesterol, triglicéridos y ácido úrico.

A pesar de que existen factores genéticos que predisponen a nuestra población a sufrir de obesidad, es posible evitarla siempre y cuando se consuma una dieta balanceada que incluya frutas y verduras, así como realizar actividad física como caminar diariamente 20 minutos.

La responsabilidad de los padres en cuanto a la alimentación de nuestros hijos, corresponde a un 90 por ciento, ya que en ocasiones se prefiere dar dinero en vez de comprar alimentos nutritivos. En cuanto a la obesidad, el país pasó de tener una población de desnutridos a ser un país de gorditos y esa transición ocurrió en menos de lo que la expectativa mundial había pensado, en menos de 20 años. La cifra es preocupante; Coahuila presenta un alto grado de obesidad y más adelante vamos a ser una sociedad en que el 50 por ciento sufra de obesidad y eso es una epidemia.

Según la Organización Mundial de la Salud, de los 32 millones de adultos con sobrepeso en México, cinco millones están en riesgo de convertirse en pacientes diabéticos en los próximos cinco años.

Digo; si estos datos no nos preocupan no nos va a preocupar nada. La información que les proporciono la obtuve de varias fuentes autorizadas en la materia como la SSA, dependencias de Salud de nuestro Estado, revistas medicas y paginas de Internet de la especialidad. Abajo les proporcionare unos enlaces donde ustedes pueden obtener muchísima más información que les podría ampliar sus conocimientos al respecto.

Nos deben preocupar aparte de la salud de los adultos, la de los niños. El mensaje de nuestras autoridades de salud es muy claro. En Coahuila tenemos un alto porcentaje de niños con problemas de sobrepeso. Como se habrán dado cuenta en los diferentes medios de información del estado, nuestras autoridades ya están poniendo atención al asunto desarrollando sus campañas y programas tendientes a solucionar el problema, pero será necesario que en el interior de nuestras familias apliquemos las propias. Esa responsabilidad no se lo podemos dejar solamente a las autoridades. Es y será siempre nuestra obligación la salud de nuestros hijos.

Nuestra escuela primaria estaba a 4 cuadras de la casa, así que mi hermana Gloria y yo nos íbamos todos los días caminando agarraditos de la mano. Para asistir a clases, Kia y yo teníamos que caminar 16 cuadras diarias (4 de ida y 4 de regreso en dos turnos), incluyendo claro, la añorada escala en la casa de mi abuelita donde recibíamos los rutinarios apapachos de ella y nuestras tías. Cargábamos una mochilota de esas de piel (que de por si sola, era pesada) llena de libros, lápices, plumas, cuadernos, reglas, compás, lonches, canicas y trompos. Ahora la mamá conciente tanto a los chicos, que a estos no les puede dar ni el aire. Llevan a los niños en coche para que no sude m´hijo y pueda llegar a su salón con el copete bien peinadito.

Después de hacer la tarea, mi hermana, mis amigos y yo salíamos a jugar a la calle, a corretear, a pasear en bicicleta, a los campos de béisbol o futbol y ya cayendo la tarde nos recogíamos, nos metíamos a bañar y cenábamos para dormir temprano. Cansadísimos del traqueteo diario. Ahora, los niños se la pasan jugando en la computadora o viendo la televisión, engullendo una gran cantidad de comida chatarra hasta altas horas de la noche y se duermen mucho después que los papás están ya roncando, sin la debida supervisión ni vigilancia de lo que comen y aprenden. Como es de suponerse, todo esto lo hacen los niños sin mover mas que los dedos de su cuerpo.

Son otros tiempos claro que si. Pero por lo mismo se requiere de otras medidas a fin de contrarrestar todas las toxinas, las costumbres y los malos hábitos alimenticios que les entran diariamente en gran cantidad a los chamacos y que definitivamente les merma su salud.
La salud de los niños es importante porque son la base de nuestro futuro. Son la base para un Coahuila lleno de oportunidades de crecimiento social, cultural y empresarial. Si ellos crecen sanos, seguramente les ayudará a ser ciudadanos ejemplares, ejecutivos eficientes, cultos y de mentalidad triunfadora. Tendremos familias saludables física y mentalmente y hasta quien quite lleguemos a contar con políticos con mentalidad de servicio y dedicación absoluta por las necesidades de sus representados (hasta crees!).

Aunque el futuro no es alentador dadas las estadísticas de salud que afecta a los niños de nuestro Estado actualmente, podemos hacer que esto cambie. Podemos hacer que no seamos parte de esa triste estadística si actuamos con la prontitud, decisión e inteligencia que nos distingue a los coahuilenses y específicamente a los nigropetences.

¿Como?. Asesorándonos con médicos y nutriólogos, investigando y aplicando las estrategias que nos recomienden desde el seno de nuestra familia. Con una buena disciplina alimenticia y con la supervisión y preocupación constante de los alimentos y golosinas que ingieren los niños. A partir de ahí y ahora es de donde debemos empezar a trabajar por nuestros niños antes que sea demasiado tarde.

Debemos ser parte de la solución, en vez de ser parte del problema de esa cruel estadística de salud.

Nos Vemos…


Las Ligas:
http://www.gordos.com/
http://guia-coahuila.guiamexico.com.mx/control-del-peso/coahuila/empresas-guia.htmlhttp://www.fmdiabetes.com/www/noticias/noticias.asp?Id=20070426071858

No hay comentarios.: