3 de junio de 2008

Y ahora...que estudio?


Parece que en estas fechas esa es la pregunta que flota en el ambiente de mi pueblo. La angustia se convierte en malestar estomacal y las dudas empiezan a corroer el carácter de los jóvenes. Su decisión será para toda la vida y saben que un error cuesta dinero…. y tiempo.

¿y ahora?.... que estudio?

Están muy jóvenes para tomar tan tremenda decision, lo sabemos, pero también sabemos que son ellos y solo ellos los que deberán de hacerlo. Es la primera decisión importante en su vida, la mas interesante, la mas delicada, la mas formal y de la cual estarán orgullosos de representar el resto de su vida. Así que, hay que pensarla bien y asesorarse adecuadamente.

En estas fechas los padres de familia se la pasan aguantando fielmente el carácter de sus críos porque ya se acerca la inscripción a la Universidad y los muchachitos no se deciden y se la pasan celebrando la graduación de prepa en carnes asadas. El papá se muerde los labios ante las ganas de influir en la carrera que habrá de cursar su hijo porque el compadre, tío o el cuñado les promete ayudarlos cuando se gradúen, en aquella carne asada o en aquella barra de cantina, mientras la mamá mas conciente, mas mamá, capotea el temporal que se se forma entre padre e hijo.

Todos sabemos, pero no nos acordamos cuando nos toca a nosotros, que el peor error de los padres es tratar de influir en una carrera, porque suponen que es lo mejor para ellos y que algún familiar o amigo les va a ayudar cuando terminen la carrera. Muchísimos casos he visto en que el supuesto benefactor cambia de empleo o de ciudad y el muchacho se queda volteando para todos lados e irremediablemente pasa a engrosar la lista de profesionistas desempleados de nuestra ciudad. Vemos pues, a los jovenes ejerciendo una actividad muy diferente a la que estudiaron.

Estudia medicina m´hijo, ya ves como ganan lana esos viejos, se levantan bien tarde y andan en cheyennes nuevas (aunque el muchacho se desmaye cuando ve sangre). M´hijo va a ser ingeniero, me dijo un amigo, no nomas porque yo lo soy compadre, porque ademas se vería bien hombre con su casco, sus botas de trabajo y sus pantalones “livais” bien ajustados, mientras al chamaco vomita el calculo y los logaritmos. M´hijo va a ser químico como su apá, me dijo otro, aunque el chamaco lo único que sabe mezclar son las micheladas. Voy a estudiar agronomia en la Narro, me dijo un compañero del Ateneo Fuente alla en mi epoca de preparatoria. Es que se ve uno con madre con sombrero y botas encarrilladas arriba de una loma disfrutando la inmensidad del rancho. Mi amigo no tenia rancho… y jamás lo llego a tener y ahora hace dinero vendiendo hamburguesas para los desvelados en Saltillo.

Según un estudio reciente del INEGI, el porcentaje de estudiantes por área de conocimiento en el estado de Coahuila indica que el 35% cursa carreras de Ciencias Sociales y Administrativas, el 27 % de Ingeniería y Tecnología y solamente el 9% se va a las carreras de Salud, el 16% a Educación y Humanidades, 5% Agropecuaria, 1% Ciencias Naturales y Exactas y un 7% No especificado. La estadística se refiere al estudiantado que existe en el Estado de Coahuila. Así que habrá que tantearle el agua a los camotes.

Ahora ya no es como antes. En mi época prácticamente te casabas con esa carrera y si te equivocabas, vivías con tu error toda tu vida. Por eso vemos abogados como trabajadores de campo en la Termo, administradores de empresas como chóferes y secretarias y a los doctores ejerciendo una especialidad que no estudiaron. Por eso vemos clínicas clandestinas donde arriesgan además de su licencia la vida de sus pacientes, por unos dólares.

Ahora existe un mundo de oportunidades para corregir el camino mientras estan en la carrera, inclusive, ya cuando la terminan. Tenemos universidades que ofrecen carreras en turnos nocturnos, maestrías, doctorados y diplomados. Tenemos a la sede del Tec de Monterrey que ofrece continuos cursos de capacitación y asesoramiento a empresas y empresarios y tenemos además, una gran cantidad de profesionistas jóvenes y no tan jóvenes, que ofrecen abiertamente sus conocimientos y experiencias en conferencias y platicas para que nuestra ciudad se desarrolle aplicando estrategias de vanguardia como es el caso de profesionistas destacados que quieren a nuestra ciudad como Abel Ayala y Memo Berchelman quienes son ejemplo de dedicación y entrega por el bien de nuestro pueblo.

El futuro profesionista debe recibir ayuda de los asesores y consultores educativos que me supongo existen en las preparatorias publicas y sobre todo de gobierno. Deben asesorarse con sus profesores, con familiares profesionistas de comprobado buen criterio. Deben armarse de valor para entrevistarse con ejecutivos de empresas de diferentes especialidades para que su visión sea mas periférica. Deberán confiar que a muchos que queremos a Piedras Negras nos gusta ayudar con nuestra opinion a los futuros profesionistas, sean hijos de amigos, familiares o desconocidos con ganas de superarse, con ganas de fortalecer a nuestra región. Serán el futuro de Piedras Negras y nomás por eso nos debe interesar ayudarlos.

Me ofrezco.

Una licenciatura ya no es suficiente en la actualidad. La especialidad es practicamente una necesidad comprobada para que los jóvenes profesionistas ejerzan su profesión, así que hay que seguir estudiando y actualizándose después de egresar de la escuela. Sepan que la competencia profesional en todas las especialidades es cada semestre mas fuerte al integrarse cada vez mas profesionistas a la actividad y al desarrollo económico de nuestra ciudad.

¿Que carrera elijo?. La que te ofrezca la mas grande satisfacción. De la que estés completamente enamorado porque vivirás con ella el resto de tu vida. Por la que te de gusto levantarte diariamente para ir a ejercerla. La que quieras seguir dándole mantenimiento actualizándote continuamente para ejercerla dignamente. La que estés dispuesto a respetar todos los días de tu vida.

¿Difícil elegir? Claro que si!. O díganme ustedes, ¿que en la vida que realmente valga la pena esta exento del sacrificio?. Dios nunca dijo que el camino seria facil, pero si que la llegada valdria la pena.

Arre!!!... que el tiempo apremia.

Aquí ando….

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