Encuentro...

Cuando el ambiente del pueblo es más pesado, cuando la seguridad de nuestros hijos esta cada día más en riesgo, cuando las familias se desquebrajan y la falta de respeto entre sus miembros llega como un cáncer, cuando la alta sociedad de este pueblo es mas indiferente y anteponen a los valores humanos la soberbia y la hipocresía, cuando hoy más que nunca el amigo nos traiciona para lograr un lugar al lado del poderoso, surge de pronto una luz que ilumina a Piedras Negras. Hoy más que nunca hacen falta eventos que nos den valor moral y que nos hagan recapacitar en la verdadera importancia de vivir. El Decimo Encuentro Carismático de la Renovación que se llevo a cabo este sábado 15 y domingo 16 de noviembre en Piedras Negras, fue eso exactamente; un remanso de tranquilidad para la verdadera sociedad de nuestro pueblo, evento que proporcionó a sus miembros, un hondo suspiro de alivio a la crisis de valores que sufrimos.

De lo único que me arrepiento es de haberme perdido los 9 eventos anteriores. Los sacerdotes que tuvieron la inmensa responsabilidad de dirigirse a los cientos de asistentes que abarrotaron el local nos hicieron recapacitar en la imperiosa necesidad hacer un alto en el camino, voltear hacia atrás para ver lo que estamos construyendo y valorar si vamos bien, o nos regresamos a construir una familia digna y una sociedad respetuosa.

Los tres sacerdotes tienen el Don de la palabra.

El padre Romeo Sánchez con su característico estilo jovial preparo el sano ambiente para que la velada fuera todo un éxito. Que manera de dirigirse a la comunidad y sobre todo a los jovenes. El padre Rodolfo Pachicano dio énfasis en los valores que como buenos católicos debemos tener hablando y actuando con la verdad aunque ésta duela. No hay valor más importante que la verdad y no hay mas deshonra de un amigo que actuar con hipocresía dijo. Con su particular estilo de oratoria, el padre fue directo en su discurso y excelente en la oración. Por último el Padre Pedro Núñez ofició la misa y terminó con la Hora Santa. La energía que desborda y la forma de alabar al Señor fue la culminación de un evento muy bien organizado y que nos hace pensar que cuando se dejan guardadas en el closet las falsas sonrisas y las poses a la María Félix y se antepone la necesidad conjunta de crear valores que ayuden a formar una sociedad digna y una familia apegada a Dios, los nigropetences nos pintamos solos.

Lejos estamos de lo que era Piedras Negras hace años. La modernidad, la creación de nuevas empresas, la llegada de paraestatales y transnacionales, la industria maquiladora, la globalización y en general el crecimiento normal de una ciudad que ofrece servicios, trabajo y techo ha ocasionado que la población vaya en aumento. Por esa razón son necesarios eventos de esta naturaleza. Que den a las familias guía y consejo para formar una buena familia adaptándose y respetando los valores de una provincia como la nuestra.

Porque, de que sirve ser un buen empleado, un ejecutivo excelente, un profesionista exitoso o un empresario poderoso si la familia, dignidad y valores los traemos por el suelo? De qué sirve tener una sociedad distinguida si no podemos andar por la calle o asistir a un restaurante sin estar con la preocupación de lo que pueda pasar. Ahora más que nunca necesitamos SER una sociedad unida que resaltemos nuestros valores, nuestras costumbres y nuestra dignidad. Ahora más que nunca debemos exigir que nos respeten y respetar a los demás y esos eventos como el de este fin de semana donde hay guías espirituales que nos aconsejan y nos hacen recapacitar son importantísimos.

Una nota aparte merecen los organizadores del evento. Ellos tienen el reconocimiento y a la gente que asistió, el agradecimiento. El Café, las donas, los burritos, los refrescos y sobre todo la atención de todos y cada uno de los responsables de las diferentes comisiones hicieron un trabajo responsable y de primera calidad.

Muy bien hecho.

Nos Vemos…